Explorando Las Cuarenta Casas: Una Joya Arqueológica en Madera
Armando Nevárez Acuña
La denominación de ‘Las Cuarenta Casas’ es un toponímico acuñado por Alvar Núñez Caveza de Vaca en el siglo XVI, y desde entonces ha sido utilizado por los vecinos del lugar para designar un número indeterminado de viviendas construidas con tierra y viguería. Los arqueólogos, por otro lado, las llaman «Casas de los Acantilados» o «Cliff Dwellings».
Este fascinante sitio arqueológico se ubica a 320 km al noroeste de la ciudad de Chihuahua, en el municipio de Madera. Se trata de un asentamiento prototípico de la provincia serrana, habitado en su momento por grupos de cazadores recolectores, basket-makers y agricultores de la Cultura Casas Grandes.
Las Cuarenta Casas fueron construidas al interior de cuevas y abrigos formados en los acantilados de las barrancas, y no solo funcionaron como asentamientos habitacionales, sino también como talleres. Este importante sitio fue declarado oficialmente como Zona de Monumentos Arqueológicos en enero de 2002.
Importancia Histórica y Cultural
El asentamiento de Las Cuarenta Casas fue crucial en las relaciones que la antigua ciudad de Paquimé mantuvo con las regiones costeras del Océano Pacífico y el Golfo de California. Los pobladores originales de este lugar cultivaron diversos alimentos, recolectaron semillas y cazaron animales para su subsistencia y fines comerciales.
Las excavaciones realizadas por el Dr. Arturo Guevara Sánchez a finales del siglo XX revelaron evidencias de textiles y restos cerámicos, así como artefactos líticos con características de la iconografía prehispánica de la región.
Exploración y Descubrimiento
El primer registro técnico y fotográfico de este sitio fue realizado por el explorador noruego Carl Lumholtz en 1892, quien, junto con el ingeniero civil y fotógrafo Sr. Taylor, documentó detalladamente Las Cuarenta Casas en su obra El México Desconocido.
Descripción y Acceso
El acceso a Las Cuarenta Casas se realiza a través de la carretera federal No. 16, en dirección suroeste desde la ciudad de Chihuahua hasta llegar a la cabecera municipal de Madera. Desde allí, se sigue por la calle Tercera en dirección norte hacia la “Mesa del Huracán”, donde se encuentra señalizada la entrada a la Zona Arqueológica. El sitio cuenta con estacionamiento, sanitarios y visitas guiadas previa cita.
Esta joya arqueológica es un testimonio vivo del legado cultural y la historia ancestral de la región, y su exploración ofrece una experiencia enriquecedora y educativa para visitantes de todas las edades.